El viaje de este año ha sido montañero sobre todo. Hemos hecho un par de trekkin, uno por Dolomitas y otro el TMB (Tour del Mont Blanc), que consiste en dar la vuelta al macizo del Mont Blanc. Yo quería llevar a Eva y a los chicos, a algunos de los lugares que he recorrido haciendo montañas de diversas formas. También ha sido un descubrimiento de nuevos sitios, tanto en las montañas como fuera de ellas. Hemos estado en Francia, Italia, Suiza, Liechtenstein y también en un par de sitios por españa.
Podéis ver la selección de fotos, con música, en este montaje:
Selección de fotos Re-Descubriendo los Alpes (Del 30 de Junio al 5 de Agosto de 2018)
Si quieres saber más del viaje, os contamos un poco...:
De camino a nuestra ruta por Europa y los Alpes, paramos un par de días donde nuestros amigos Agus, Pilar, Javi y Danko, en la Sierra de Guara. Además de disfrutar de su compañía hemos hecho un par de barrancos.
El primer día hicimos los Oscuros del Balced, que fue el primer barranco que hicieron los chicos y que también lo hicimos con Agus. Había muchísima agua y bajaba algo turbia, disfrutamos mucho aunque nos sobró el hecho de que había bastante gente. Por suerte Agus se conoce alternativas que nos evitaron varias esperas...
Al día siguiente tocó el espectacular barranco del Mascún, con el agua justa, cristalina y prácticamente solos. Es un barranco largo y exigente pero tiene lugares increíbles y vistas espectaculares, además de saltos guapísimos y rápeles impresionantes...
El primer sitio al que vamos después de Guara es a Vallon-Pont d'Arc. Por allí pasa el río Ardeche que forma un impresionante puente natural. Este puente debe tener unos 30 metros de altura desde el agua al arco y luego otros 10 de piedra hasta arriba. Como es de roca caliza tiene muchos agujeros y formaciones. La gente, mucha, viene aquí a bañarse y disfrutar del agua y las vistas. Se puede saltar desde varios puntos, incluso desde dentro de una cueva. Nosotros, como mucha otra gente hicimos un descenso en piragua de 13 km. Nos lo pasamos fenomenal pues hay algunos puntos desde donde se puede saltar al agua. También, en la piragua, se salvan un par de cascadas bajando con la barca por un tobogán. Hay algunos rápidos pequeños que le dan algo de emoción. En la parte final esta el Pont d'Arc, como gran fin de fiesta!
Nuestro siguiente destino ha sido Milán. Allí hemos disfrutado con un poco de cultura (no todo va a ser naturaleza). Hemos estado viendo el fresco de Leonardo da Vinci, "La Última Cena", una obra espectacular pintada en la pared del comedor de un convento. Al ser un fresco, los detalles se han perdido un poco y le falta algo de brillo, aún así el conjunto es una maravilla. Esa tarde, después de pasear bastante rato por el centro, acabamos de casualidad en un restaurante de barrio cerca de donde estamos alojados. Se llama Picollo Garden y hemos cenado de lujo. Barato, mucha cantidad y muy bueno todo, además del trato que ¡nos ha encantado!
Antes de irnos de la ciudad hemos visitado su espectacular Duomo (catedral), que merece sin duda una visita relajada. Es uno de los edificios más grandes y altos de Italia y no defrauda ni su parte externa ni el interior. También decidimos subir al tejado, pero eso no nos gustó tanto porque había mucha gente y no pudimos disfrutar ni de las vistas, ni de tranquilidad.
Al norte de Milán está el Lago Di Como, el más grande de Italia. Lo hemos medio recorrido en barco (barco público con muchas paradas). Es un lugar donde vienen los milaneses a refrescarse y donde además de bonitos pueblos en sus laderas, también hay suntuosas villas, que sólo se ven desde el agua. Los pueblos de Varenna y Bellagio son los que más nos han gustado.
Acabamos de terminar nuestro primer trekking, por Dolomitas. Aunque algo cansados, hemos acabado encantados. ¡Ha sido una gozada, un recorrido aventurero y espectacular con vistas increíbles! ¡¡Creo que ha sido el recorrido de montaña que más me ha gustado!!
Os lo contamos por días, a ver si podemos transmitir un poco de lo que hemos disfrutado, y sufrido, estos días.
DÍA 1: Lago Misurina - Ref. Fonda Savio
Íbamos a subir por un collado algo más largo pero con mejores vistas, pero no hemos podido porque está cerrado! Así que lo hacemos por el camino normal, por donde va bastante gente. Como nos ha sabido a poco nos subimos hacia una forcella (collado) a la que no podemos acceder pues está complicado. Sin embargo hemos disfrutado de las que creemos son las mejores vistas de las Tres Cimas de Lavaredo!!
DIA 2: Ref. Fonda Savio - Ref. Auronzo
Esta etapa es muy corta debido a que no pudimos reservar en el refugio que queríamos. Sin embargo ha sido una de las más aventureras. El día amanece algo nublado, lo que no nos permite ver a lo lejos, pero no nos impide ver bien el recorrido. Vamos por el Sendero Alberto Bonacossa, que nada más empezar tiene una fuerte bajada donde hay un cable para agarrarte si lo necesitas. Después de bajar un nevero y por una pedrera, llegamos a una arista muy fácil donde el camino nos irá llevando de un lado a otro. Una nueva bajada nos lleva hasta una canal por la que tenemos que subir. También hay un cable para sujetarse, escalones, una escalera.. Sin embargo está algo mojado y hay que ir con cuidado. De hecho, la mayoría de la gente va con material para ferratas. Aún así pasamos sin problemas.
Una última subida nos lleva a nuestro destino. Supuestamente estamos debajo de la cima Oeste de las Cimas de Lavaredo, pero no podemos verla porque el día está bastante feo. No podemos ni salir a dar una vuelta porque se pasa toda la tarde lloviendo. A este refugio llega una carretera, parece un hotel y está lleno de Japoneses ¡con maletas enormes!
DÍA 3: Ref. Auronzo - Ref. Vallandro
Esta es, a priori, la etapa más larga. Primero hacemos un recorrido alrededor de las Tres Cimas en dirección oeste hasta que llegamos debajo del refugio Locatelli, que era al que queríamos ir. Un recorrido similar a este hicimos en 2010 cuando fuimos a Rumanía, en casa tenemos una foto colgada los 4, nos hemos hecho otra foto en el mismo sitio... Allí comenzamos una larga y fácil bajada que nos lleva hasta el fondo del Valle por donde pasa una importante carretera. La cruzamos y comenzamos a subir por una senda muy pequeñita, pero bien marcada, que va entre árboles, aunque con una subida tremenda!! Lo malo es que durante bastante rato oímos la carretera debajo nuestro. De repente llegamos a un túnel excavado en la pared por el que pasamos para llegar al valle de atrás. De nuevo un cable y algunos pasos que hay que hacer con cuidado le dan más chispa a la ruta. Un poco antes del refugio se puede subir a un pico, Strudelkoft, con muy buenas vistas. En el refugio Vallandro nos sentimos muy bien, el entorno está fenomenal y parece un hotelito de montaña.
DÍA 4: Ref. Vallandro - Ref. Sennes
Primera parte sencilla disfrutando de buenas vistas. El camino nos lleva hacia una ladera de piedras, pero está cortado por desprendimientos. Los desvíos están perfectamente señalizados, como todos los caminos. Nos encontramos con un grupo grande de gente de Madrid, del club Peñalara, unas bromas y seguimos marcha. Paramos a comer en el refugio Biella, en la terraza.
Cerca de aquí se puede subir a un pico, La Crod del Becco. Lo hacemos los chicos y yo, mientras Eva se queda en el refugio con las mochilas. La subida es espectacular pues va ganando altura muy rápidamente por un espolón. La cima está a más de 2.800m con lo que tenemos muy buenas vistas. A nuestros pies hay un cortado tremendo, tenemos el valle debajo, dan ganas de sacar unas alas y echarse a volar. En el collado había un cartel que decía que se tardaban 1h20 en subir, hemos tardado eso en subir y bajar, más el ratito que hemos estado arriba.
El refugio de Sennes también es de los de tipo hotelito. Nosotros nos alojamos en dormitorios compartidos, también hay habitaciones a precios bastante altos.
DÍA 5: Ref. Sennes - Ref. Lavarella
Esta, quizás, ha sido la etapa más sencilla. Una gran bajada y una gran subida, en ambos casos por una pista salvo algún atajo de vez en cuando. La bajada la hacemos por un valle muy boscoso, vamos paralelos a una pared vertical que cada vez, según bajamos, es más espectacular. Hay mucha gente subiendo, ¿domingueros?, que cuando llevan subidos 5 minutos nos preguntan si queda mucho para el refugio del que salimos hace 2h...
La subida es también por una pista, pero casi sin árboles, con bastantes familias subiendo. Compartimos el último tramo con una «ranger», que cuida que todo está bien e informa a los caminantes. Junto al refugio hay un laguito y muchas vacas. Estos lindos animalitos tienen la costumbre de defecar donde les parece y David ha pisado «la mierda» ¡con chancletas! Luego ha tenido que meter el pie en el agua helada.
DIA 6 Último: Ref. Lavarella - Ref. Val Parolla
El inicio es relajado e idílico, hasta que vemos el paso/collado por el que accederemos al otro valle. Se trata de la Forcella del Lago, una apertura en un circo de paredes imponentes. El collado tiene forma de V y tiene una pinta espectacular. Deseando llegar a ver lo que nos depara el otro valle subimos con buen ritmo. De la gente con la que compartimos recorridos no somos los más rápidos pero vamos adelantando a gente sobre todo en las subidas.
La bajada por el otro lado es muy vertical con muchísimas zetas y un camino bien preparado para toda la gente que bajamos. Pronto vemos el lago que está debajo, azul turquesa, precioso.
Al fondo, en lo alto vemos el refugio Locatelli a donde queremos ir a comer. Nos parece que está cerca, pero en realidad tardamos mucho más de lo que pensamos porque está muy lejos. Un poco antes de llegar comenzamos a ver agujeros en las rocas, se trata de galerías que se usaron durante la segunda guerra mundial. A este conjunto de galerías, caminos... Se le conoce como Museo a Cielo Abierto. Disfrutamos muchísimo entrando en las galerías con las linternas, investigando.... Al refugio llega un funicular, por eso está lleno de gente. Decidimos bajar por el sendero por donde bajaban y subían las tropas. Es muy vertical y se ha convertido en una buena aventura, hay cables a los que sujetarse, clavijas para bajar, escaleras, un puente colgante, otra galería con por lo menos 50 metros de profundidad y para terminar un recorrido por las trincheras. Sin duda un gran final para nuestra ruta.
De camino a los Alpes suizos hacemos varias paradas.
La primera nos lleva a un país que no hemos visitado: Liechtenstein. Un país muy pequeñito entre Suiza y Austria.
Lo que más nos ha sorprendido, negativamente, son los precios. ¡Todo es carísimo! Un café cuesta 6€, una hamburguesa 35€, en el camping... Así que nos hemos aplicado una política de contención del gasto y hemos cruzado el río Rhin para comprar las cosas de comer, ¡en Suiza!
Aparte de esto, es un país muy, muy tranquilo y civilizado. Todo es amplio y la gente además de muy amable es muy respetuosa. La capital se llama Vaduz y su calle comercial debe medir unos 200 metros. En ellos se concentran su catedral y los edificios gubernamentales. Encima de la ciudad, en las montañas que rodean este país, se encuentra el castillo donde vive la familia real. Se puede ver por fuera, sin entrar. Dentro de la ciudad hay propiedades que tienen viñedos. Una de ellas, la Casa Roja, es bastante curiosa.
También nos hemos pasado por el, aún más relajado, pueblo de Balzers. Aquí hay otra Iglesia bien chula, de piedras, que sólo podemos ver por fuera disfrutando de un mini concierto de campanas. En un alto hay un castillo rodeado de viñedos y en una ladera, lo más guapo, ¡un parque infantil que mola un montón!
De camino hacia Interlaken hacemos dos visitas (hay que aprovechar los traslados). La primera al pueblo de Steim am Rhein, que está a orillas del río Rhin. Es un pueblo tradicional que tiene de curioso que las fachadas de las casas de su calle principal están decoradas como si fueran comics. También hemos visitado un antiguo monasterio, que nos ha gustado mucho. El interior tiene muchas cosas de madera y hay un olor muy agradable. La otra parada son las cataratas del Rhin, que están a apenas 30 minutos en coche. Es bastante impresionante el caudal de agua que pasa por unos 50m de ancho, aunque la caída no es especialmente grande. En el medio siguen resistiendo algunas rocas. De hecho, a una de ellas se puede acceder con barco. Eso es lo que menos nos gusta la cantidad de gente que hay...
En la zona de Interlaken queremos subir a Jungfraujoch. A donde llega el tren que sube más alto de Europa, llega hasta más de 3.100 metros de altura. La decisión es difícil ya que nos cuesta más de 600€. Y eso que vamos a coger el primer tren, a las 7h37 de la mañana. Decidimos hacerlo, aunque la duda nos corroe un poco. Al final nos merecerá la pena y David dice que es uno de los sitios más impresionantes que ha visto. El tren sube por DENTRO de una montaña de las míticas, el Eiger (ogro), cuya cara norte es un desafío al alcance de pocos alpinistas. Hace una parada en medio de la montaña, de 10 minutos que permite ver un poco de esta pared desde unos ventanales. Al llegar arriba salimos a un plató glaciar con buenas vistas. Nosotros, la mayoría de la gente no lo hace, vamos caminando por la nieve hasta el refugio del Monch, 45 minutos. Aunque estamos algo afectados por la altura echamos algunas carreras por la nieve y alguna que otra lucha. Pasamos un muy buen rato. Al volver hacemos las turistadas de rigor, subir en un ascensor hasta los 3.400m, entrar en una galería de hielo, ir a varios miradores....
Continuamos viaje hacia Zermatt, con la idea de ver el Cervino. Nos alojamos en un pueblo anterior, ya que hasta Zermatt no pueden subir coches que no sean eléctricos o taxis. Lo hacemos en el mismo camping al que vine yo, hace 25 años cuando subí al Cervino y que sigue estando ¡igual de cutre! El tiempo no es muy bueno para los próximos días, así que subimos a ver la montaña de todas formas. No la llegaremos a ver completamente despejada en ningún momento, pero si veremos lo imponente que es. La cara norte la podemos observar íntegramente, desde cerca de las cascadas por las que desagua el hielo. La ruta de bajada es espectacular por un bosque de ensueño con el pueblo de Zermatt a nuestros pies.
Por la tarde/noche nos cae el diluvio universal, por suerte la tienda aguanta casi perfectamente. Como amanece muy mal día recogemos para dirigirnos a nuestra última parada antes de empezar el Tour del Mont Blanc (TMB), el pueblo de Chamonix. Tenemos dos días, el primero hacemos una caminata para ver la Mer de Glace. Es una pasada, una lengua de hielo que hace una curva para bajar entre altísimas montañas. Entre otras podemos ver Los Dru, las Grandes Jorasses. Bajamos también hasta el glaciar donde hay escavada una galería en el hielo. Es una turistada, si, pero a la vez una pasada poder caminar por un túnel de hielo que debe tener más de mil años.
El día antes de empezar el Tour pensábamos relajarnos, hacer la colada, preparar las mochilas...., pero ha amanecido completamente despejado, así que nos hemos subido a la Aiguille du Midi, de 3.800m, eso sí, en teleférico. Aquí nos sale más barato pues hacen descuento a discapacitados y, lo mejor, ¡no hemos tenido que esperar la cola! Yo no había subido nunca, ahora me arrepiento, es impresionante. Volvemos a ver las Grandes Jorasses, está vez si El Diente del Gigante y además la artista de los cuatromiles que lleva al Mont Blanc. Incluso, a lo lejos se ve el Gran Conbin. Lo que no vemos, porque está nublado son el Monte Rosa ni el Cervino. Hay gente andando, con cuerdas, por el glaciar y otros escalando alguna de las agujas que tenemos cerca. Estamos alucinados, casi ni sabemos donde mirar ni que vistas son más impresionantes.
Y de regalo sorpresa, por la tarde, un concierto de órgano en la Iglesia de Chamonix. Hemos llegado cuando estaba acabando el ensayo y Eva ha dicho, que pena llegamos tarde. Un señor que estaba allí nos dice que si queremos que toque para nosotros.. Ha sido una pasada, incluso hemos subido y le hemos estado viendo tocar. Esta con los pies descalzos ya que además de los dos teclados para las manos hay otro que va tocando con los pies. Y no sólo eso, que hay unas «válvulas» que va abriendo y cerrando.
Bueno, pues esto se está acabando... acabamos de terminar el TMB (Tour del Mont Blanc), con un poco de mala suerte porque Martín se ha torcido el tobillo y no ha podido hacer los tres últimos días.
El recorrido es espectacular. Las vistas son impresionantes, hemos podido ver todo despejado incluidas varias veces la cima del Mont Blanc.
Etapa 1: Les Houches - Albergue Du Truc.
Se sube junto a una pista de esquí, tras llegar al collado comienza la ruta de verdad, un camino montañero que a ratos va entre árboles y otros con vistas a glaciares que parece que nos van a caer encima. De hecho se cruza el río que baja de uno de estos por un puente colgante.
El albergue Du Truc se encuentra en una idílica colina, con bonitas vistas.
Etapa 2: Albergue Du Truc - Ref. Croix du Bonhomme
Comenzamos bajando hasta el pueblo de Les Contamines y luego caminando paralelos al río hasta una iglesia donde también se podía llegar con bus gratuito. Luego nos queda una larga subida, la mayor parte por una pista con un río caudaloso y encajonado a nuestra izquierda.
Desde el refugio salimos a dar un paseo: una subida por una arista fácil, pero espectacular.
Día 3: Ref. Croix du Bonhomme - Ref. Elisabetta
Comenzamos con una pequeña subida en 30 minutos estamos arriba y vemos que podemos subir a la Tete Nord des Fours, que está cerca y tiene una tabla de orientación, de esas que señalan todos los picos que puedes ver. Es guapa la vista, con el Mont Blanc bastante cerca y despejado.
El refugio de Elisabetta está fenomenal debajo de un par de glaciares que están muy cerca.
Día 4: Ref. Elisabetta - Ref. Bertone
Los dos pueblos importantes junto al Mont Blanc son Chamonix en el lado francés y Courmayeur en el italiano. Por este último vamos a pasar hoy.
Después de bajar durante una hora por una pista Eva y David, que no se encuentra muy bien, bajan en bus hasta Courmayeur. Mientras Martín y yo nos cogemos el camino del TMB que nos sube hasta un collado con muy buenas vistas: la arista Innominata la tenemos en frente, con el glaciar de la Miage. Un poco más allá se ve el Diente del Gigante y Las Grandes Jorasses, desde el lado contrario al que vimos desde la Aiguille du Midi. Seguimos bajando con buen ritmo hasta que llegamos a un refugio/cafetería que está encima de Courmayeur. Un peruano, que está trabajando allí, pega la hebra con nosotros y nos dice que se tarda 1h30 en bajar. Lo hacemos, a la carrera, en 35 minutos y eso que son 1200m de desnivel. El camino es muy empinado y estrecho, lleno de raíces.
Como David sigue sin encontrarse bien y a Martín le duele algo la rodilla, deciden subirse un tramo en bus. Eva y yo tenemos mil metros de subida por un camino precioso, pero sin ningún respiro.
Día 5: Ref. Bertone - Ref. Elelena
Hoy tenemos dos opciones, una larga y una corta. Me he empeñado en hacer la larga pensando que tendríamos mejores vistas. Igual no merecía la pena... al llegar a la parte final de la primera subida resulta que vemos que sale un camino que va hacia donde nos dirigimos y que quizás nos evite la siguiente subida que nos queda. Como hay algo de cansancio y vemos a una gente que va por ahí, nos decidimos a cogerlo. ¡Error!, al poco rato el camino medio desaparece y tenenos que ir buscando pequeñas trazas que nos llevan a unas antiguas construcciones casi destruidas. Intentamos bajar hacia un valle pues en frente vemos un buen camino, pero está muy empinado y resbaladizo ya que ha empezado a llover.
En esas estamos, mirando si podemos bajar o no, cuando Martín se cae y grita. Se ha torcido el tobillo, le duele mucho. Como por aquí no hay paso nos volvemos justo cuando cae el Gran chaparrón. Buscamos una bajada, en dirección hacia donde venimos, hasta que conseguimos enlazar con la ruta que había descartado.
Bajamos hasta una carretera donde Eva y Martín toman un bus para ir primero a Courmayeur y luego a Chamonix. Allí van al hospital y le dicen que es un esguince, pero nada grave.
Mientras David y yo seguimos hacia el refugio Elena. Pasamos junto a una cascada espectacular y nos dan muchas ganas de darnos un baño. No lo hacemos porque vamos algo tarde y tenemos que llegar al refugio y decir que sólo vamos dos. Antes, sin embargo, pasamos por un río donde hay un nevero por debajo del cual pasa el agua. David dice que nos metamos, eso hacemos con algo de miedito por que no se nos caiga encima.
Día 6: Ref. Elena - Ref. Relais d'Arpette
Esta es la etapa más larga del recorrido, aunque en teoría se puede hacer un buen tramo en bus...
Salimos, David y yo, con buen ritmo por la subida que hay detrás del refugio. Salvamos los 500 metros de desnivel y estamos en Suiza. La bajada es fácil y cómoda, en no mucho tiempo llegamos al pueblo donde se supone que se toma el bus. Cuando vemos el precio, 12€, se nos quitan las ganas de tomarlo y seguimos andando. Vamos por una ruta preciosa siguiendo un canal de agua que está debajo del camino.
Tras salir de este camino vamos cruzando el río de un lado a otro y atravesando varias poblaciones. En estos pueblos las casas son muy chulas y muchas tienen gnomos y figuras en el jardín o las puertas.
La subida al lago Champex es un camino que llaman la ruta de los champiñones. Se trata de una senda lleva de raíces y de figuras esculpidas en los troncos de los árboles teniendo a las setas como protagonistas.
Según nuestro GPS hemos hecho 37,5 km.
Han venido, Eva y Martín, a dormir con nosotros ya que se llega con el coche. Eva seguirá ruta con nosotros mientras Martín nos esperará en Chamonix.
Día 7: Ref. Relais d'Arpette - Ref. Ecuries de Charamillon
La etapa más dura con diferencia es la de hoy, no tanto por la distancia o por el desnivel sino por el terreno. No habrá ningún tramo fácil, todos serán algo técnicos con muchísimas piedras. Tenemos mil metros de subida que se hace dura, más dura aún será la bajada, empinada y a tramos resbaladiza. Eva se ha pegado un buen costalazo, por suerte sin consecuencias.
Aún nos queda una subida más, larga aunque no muy empinada. Pasamos junto a una pared vertical bastante impresionante.
David se va por delante pues vamos algo tarde y no sea que la cena la sirvan muy pronto. Eva va cansada y dolorosa pero aguanta como una jabata. La cena es a las 19h, llegamos por los pelos. Hay unas espectaculares vistas del Mont Blanc completamente despejado. Compartimos cena y charla con las chicas vascas (Marta, Olga y Mirari) con las que hemos ido coincidiendo desde hace varios días.
Día 8: Ref. Ecuries de Charamillon - Lac Blanc - Chamonix
La etapa de hoy se supone que es relajada. Una buena bajada y una larga subida, tardamos cuatro horas y media, nos lleva hasta el lago Blanco (Lac Blanc). Hay mucha gente, aunque es una pasada ya que está en un sitio privilegiado frente al Mont Blanc. David y yo nos metemos pero ha sido un baño rapidísimo, no hay quien aguante dentro.
Desde aquí tenemos una bajada de una hora hasta el teleférico que baja hasta el valle de Chamonix. De nuevo nos encontramos con la disyuntiva de si pagar o usar las piernas... cuesta 14,50€ la bajada. David y yo nos bajamos andando a Chamonix. Permitiéndonos así terminar, como debe ser, el TMB.
Después de terminar el TMB y comprar unas camisetas en chamonix comenzamos la vuelta a casa. Primero paramos en el pueblo de Annecy que es conocido como la "Venecia de los Alpes". Se trata de un pueblo de veraneo situado junto a un enorme lago. Dentro del pueblo además de montones de restaurantes, heladerías, tiendas y ordas de turistas, hay varios canales. Están mucho más cuidados que los de la ciudad italiana, seguramente porque son pocos y porque no hay tráfico por ellos. Nos ha gustado mucho, tanto de noche como de día. Lo peor es que estamos a primeros de agosto y parecen haberse citado aquí todos los veraneantes franceses.
De aquí, por no pegarnos la gran paliza con el coche, nos vamos al Cabo de Creus, con dos objetivos: visitar el museo de Dalí en Figueras y poder ir a cenar/comer sin tener que pagar un dineral!!!
El museo nos ha encantado, hemos estado allí bastante rato. Como todo lo que hacía este genial pintor, el museo es también un juego y hay que estar continuamente alerta para descubrir lo que nos quiere decir o lo que se esconde en las obras y/o pinturas. De echo, en varias ocasiones hemos tenido que volver sobre nuestros pasos para volver a observar alguna obra y apreciar nuevos detalles.
¡¡Esto ha sido todo, amigos!!
Podéis ver la selección de fotos, con música, en este montaje:
Selección de fotos Re-Descubriendo los Alpes (Del 30 de Junio al 5 de Agosto de 2018)
Si quieres saber más del viaje, os contamos un poco...:
De camino a nuestra ruta por Europa y los Alpes, paramos un par de días donde nuestros amigos Agus, Pilar, Javi y Danko, en la Sierra de Guara. Además de disfrutar de su compañía hemos hecho un par de barrancos.
El primer día hicimos los Oscuros del Balced, que fue el primer barranco que hicieron los chicos y que también lo hicimos con Agus. Había muchísima agua y bajaba algo turbia, disfrutamos mucho aunque nos sobró el hecho de que había bastante gente. Por suerte Agus se conoce alternativas que nos evitaron varias esperas...
Al día siguiente tocó el espectacular barranco del Mascún, con el agua justa, cristalina y prácticamente solos. Es un barranco largo y exigente pero tiene lugares increíbles y vistas espectaculares, además de saltos guapísimos y rápeles impresionantes...
El primer sitio al que vamos después de Guara es a Vallon-Pont d'Arc. Por allí pasa el río Ardeche que forma un impresionante puente natural. Este puente debe tener unos 30 metros de altura desde el agua al arco y luego otros 10 de piedra hasta arriba. Como es de roca caliza tiene muchos agujeros y formaciones. La gente, mucha, viene aquí a bañarse y disfrutar del agua y las vistas. Se puede saltar desde varios puntos, incluso desde dentro de una cueva. Nosotros, como mucha otra gente hicimos un descenso en piragua de 13 km. Nos lo pasamos fenomenal pues hay algunos puntos desde donde se puede saltar al agua. También, en la piragua, se salvan un par de cascadas bajando con la barca por un tobogán. Hay algunos rápidos pequeños que le dan algo de emoción. En la parte final esta el Pont d'Arc, como gran fin de fiesta!
Nuestro siguiente destino ha sido Milán. Allí hemos disfrutado con un poco de cultura (no todo va a ser naturaleza). Hemos estado viendo el fresco de Leonardo da Vinci, "La Última Cena", una obra espectacular pintada en la pared del comedor de un convento. Al ser un fresco, los detalles se han perdido un poco y le falta algo de brillo, aún así el conjunto es una maravilla. Esa tarde, después de pasear bastante rato por el centro, acabamos de casualidad en un restaurante de barrio cerca de donde estamos alojados. Se llama Picollo Garden y hemos cenado de lujo. Barato, mucha cantidad y muy bueno todo, además del trato que ¡nos ha encantado!
Antes de irnos de la ciudad hemos visitado su espectacular Duomo (catedral), que merece sin duda una visita relajada. Es uno de los edificios más grandes y altos de Italia y no defrauda ni su parte externa ni el interior. También decidimos subir al tejado, pero eso no nos gustó tanto porque había mucha gente y no pudimos disfrutar ni de las vistas, ni de tranquilidad.
Al norte de Milán está el Lago Di Como, el más grande de Italia. Lo hemos medio recorrido en barco (barco público con muchas paradas). Es un lugar donde vienen los milaneses a refrescarse y donde además de bonitos pueblos en sus laderas, también hay suntuosas villas, que sólo se ven desde el agua. Los pueblos de Varenna y Bellagio son los que más nos han gustado.
Acabamos de terminar nuestro primer trekking, por Dolomitas. Aunque algo cansados, hemos acabado encantados. ¡Ha sido una gozada, un recorrido aventurero y espectacular con vistas increíbles! ¡¡Creo que ha sido el recorrido de montaña que más me ha gustado!!
Os lo contamos por días, a ver si podemos transmitir un poco de lo que hemos disfrutado, y sufrido, estos días.
DÍA 1: Lago Misurina - Ref. Fonda Savio
Íbamos a subir por un collado algo más largo pero con mejores vistas, pero no hemos podido porque está cerrado! Así que lo hacemos por el camino normal, por donde va bastante gente. Como nos ha sabido a poco nos subimos hacia una forcella (collado) a la que no podemos acceder pues está complicado. Sin embargo hemos disfrutado de las que creemos son las mejores vistas de las Tres Cimas de Lavaredo!!
DIA 2: Ref. Fonda Savio - Ref. Auronzo
Esta etapa es muy corta debido a que no pudimos reservar en el refugio que queríamos. Sin embargo ha sido una de las más aventureras. El día amanece algo nublado, lo que no nos permite ver a lo lejos, pero no nos impide ver bien el recorrido. Vamos por el Sendero Alberto Bonacossa, que nada más empezar tiene una fuerte bajada donde hay un cable para agarrarte si lo necesitas. Después de bajar un nevero y por una pedrera, llegamos a una arista muy fácil donde el camino nos irá llevando de un lado a otro. Una nueva bajada nos lleva hasta una canal por la que tenemos que subir. También hay un cable para sujetarse, escalones, una escalera.. Sin embargo está algo mojado y hay que ir con cuidado. De hecho, la mayoría de la gente va con material para ferratas. Aún así pasamos sin problemas.
Una última subida nos lleva a nuestro destino. Supuestamente estamos debajo de la cima Oeste de las Cimas de Lavaredo, pero no podemos verla porque el día está bastante feo. No podemos ni salir a dar una vuelta porque se pasa toda la tarde lloviendo. A este refugio llega una carretera, parece un hotel y está lleno de Japoneses ¡con maletas enormes!
DÍA 3: Ref. Auronzo - Ref. Vallandro
Esta es, a priori, la etapa más larga. Primero hacemos un recorrido alrededor de las Tres Cimas en dirección oeste hasta que llegamos debajo del refugio Locatelli, que era al que queríamos ir. Un recorrido similar a este hicimos en 2010 cuando fuimos a Rumanía, en casa tenemos una foto colgada los 4, nos hemos hecho otra foto en el mismo sitio... Allí comenzamos una larga y fácil bajada que nos lleva hasta el fondo del Valle por donde pasa una importante carretera. La cruzamos y comenzamos a subir por una senda muy pequeñita, pero bien marcada, que va entre árboles, aunque con una subida tremenda!! Lo malo es que durante bastante rato oímos la carretera debajo nuestro. De repente llegamos a un túnel excavado en la pared por el que pasamos para llegar al valle de atrás. De nuevo un cable y algunos pasos que hay que hacer con cuidado le dan más chispa a la ruta. Un poco antes del refugio se puede subir a un pico, Strudelkoft, con muy buenas vistas. En el refugio Vallandro nos sentimos muy bien, el entorno está fenomenal y parece un hotelito de montaña.
DÍA 4: Ref. Vallandro - Ref. Sennes
Primera parte sencilla disfrutando de buenas vistas. El camino nos lleva hacia una ladera de piedras, pero está cortado por desprendimientos. Los desvíos están perfectamente señalizados, como todos los caminos. Nos encontramos con un grupo grande de gente de Madrid, del club Peñalara, unas bromas y seguimos marcha. Paramos a comer en el refugio Biella, en la terraza.
Cerca de aquí se puede subir a un pico, La Crod del Becco. Lo hacemos los chicos y yo, mientras Eva se queda en el refugio con las mochilas. La subida es espectacular pues va ganando altura muy rápidamente por un espolón. La cima está a más de 2.800m con lo que tenemos muy buenas vistas. A nuestros pies hay un cortado tremendo, tenemos el valle debajo, dan ganas de sacar unas alas y echarse a volar. En el collado había un cartel que decía que se tardaban 1h20 en subir, hemos tardado eso en subir y bajar, más el ratito que hemos estado arriba.
El refugio de Sennes también es de los de tipo hotelito. Nosotros nos alojamos en dormitorios compartidos, también hay habitaciones a precios bastante altos.
DÍA 5: Ref. Sennes - Ref. Lavarella
Esta, quizás, ha sido la etapa más sencilla. Una gran bajada y una gran subida, en ambos casos por una pista salvo algún atajo de vez en cuando. La bajada la hacemos por un valle muy boscoso, vamos paralelos a una pared vertical que cada vez, según bajamos, es más espectacular. Hay mucha gente subiendo, ¿domingueros?, que cuando llevan subidos 5 minutos nos preguntan si queda mucho para el refugio del que salimos hace 2h...
La subida es también por una pista, pero casi sin árboles, con bastantes familias subiendo. Compartimos el último tramo con una «ranger», que cuida que todo está bien e informa a los caminantes. Junto al refugio hay un laguito y muchas vacas. Estos lindos animalitos tienen la costumbre de defecar donde les parece y David ha pisado «la mierda» ¡con chancletas! Luego ha tenido que meter el pie en el agua helada.
DIA 6 Último: Ref. Lavarella - Ref. Val Parolla
El inicio es relajado e idílico, hasta que vemos el paso/collado por el que accederemos al otro valle. Se trata de la Forcella del Lago, una apertura en un circo de paredes imponentes. El collado tiene forma de V y tiene una pinta espectacular. Deseando llegar a ver lo que nos depara el otro valle subimos con buen ritmo. De la gente con la que compartimos recorridos no somos los más rápidos pero vamos adelantando a gente sobre todo en las subidas.
La bajada por el otro lado es muy vertical con muchísimas zetas y un camino bien preparado para toda la gente que bajamos. Pronto vemos el lago que está debajo, azul turquesa, precioso.
Al fondo, en lo alto vemos el refugio Locatelli a donde queremos ir a comer. Nos parece que está cerca, pero en realidad tardamos mucho más de lo que pensamos porque está muy lejos. Un poco antes de llegar comenzamos a ver agujeros en las rocas, se trata de galerías que se usaron durante la segunda guerra mundial. A este conjunto de galerías, caminos... Se le conoce como Museo a Cielo Abierto. Disfrutamos muchísimo entrando en las galerías con las linternas, investigando.... Al refugio llega un funicular, por eso está lleno de gente. Decidimos bajar por el sendero por donde bajaban y subían las tropas. Es muy vertical y se ha convertido en una buena aventura, hay cables a los que sujetarse, clavijas para bajar, escaleras, un puente colgante, otra galería con por lo menos 50 metros de profundidad y para terminar un recorrido por las trincheras. Sin duda un gran final para nuestra ruta.
De camino a los Alpes suizos hacemos varias paradas.
La primera nos lleva a un país que no hemos visitado: Liechtenstein. Un país muy pequeñito entre Suiza y Austria.
Lo que más nos ha sorprendido, negativamente, son los precios. ¡Todo es carísimo! Un café cuesta 6€, una hamburguesa 35€, en el camping... Así que nos hemos aplicado una política de contención del gasto y hemos cruzado el río Rhin para comprar las cosas de comer, ¡en Suiza!
Aparte de esto, es un país muy, muy tranquilo y civilizado. Todo es amplio y la gente además de muy amable es muy respetuosa. La capital se llama Vaduz y su calle comercial debe medir unos 200 metros. En ellos se concentran su catedral y los edificios gubernamentales. Encima de la ciudad, en las montañas que rodean este país, se encuentra el castillo donde vive la familia real. Se puede ver por fuera, sin entrar. Dentro de la ciudad hay propiedades que tienen viñedos. Una de ellas, la Casa Roja, es bastante curiosa.
También nos hemos pasado por el, aún más relajado, pueblo de Balzers. Aquí hay otra Iglesia bien chula, de piedras, que sólo podemos ver por fuera disfrutando de un mini concierto de campanas. En un alto hay un castillo rodeado de viñedos y en una ladera, lo más guapo, ¡un parque infantil que mola un montón!
De camino hacia Interlaken hacemos dos visitas (hay que aprovechar los traslados). La primera al pueblo de Steim am Rhein, que está a orillas del río Rhin. Es un pueblo tradicional que tiene de curioso que las fachadas de las casas de su calle principal están decoradas como si fueran comics. También hemos visitado un antiguo monasterio, que nos ha gustado mucho. El interior tiene muchas cosas de madera y hay un olor muy agradable. La otra parada son las cataratas del Rhin, que están a apenas 30 minutos en coche. Es bastante impresionante el caudal de agua que pasa por unos 50m de ancho, aunque la caída no es especialmente grande. En el medio siguen resistiendo algunas rocas. De hecho, a una de ellas se puede acceder con barco. Eso es lo que menos nos gusta la cantidad de gente que hay...
En la zona de Interlaken queremos subir a Jungfraujoch. A donde llega el tren que sube más alto de Europa, llega hasta más de 3.100 metros de altura. La decisión es difícil ya que nos cuesta más de 600€. Y eso que vamos a coger el primer tren, a las 7h37 de la mañana. Decidimos hacerlo, aunque la duda nos corroe un poco. Al final nos merecerá la pena y David dice que es uno de los sitios más impresionantes que ha visto. El tren sube por DENTRO de una montaña de las míticas, el Eiger (ogro), cuya cara norte es un desafío al alcance de pocos alpinistas. Hace una parada en medio de la montaña, de 10 minutos que permite ver un poco de esta pared desde unos ventanales. Al llegar arriba salimos a un plató glaciar con buenas vistas. Nosotros, la mayoría de la gente no lo hace, vamos caminando por la nieve hasta el refugio del Monch, 45 minutos. Aunque estamos algo afectados por la altura echamos algunas carreras por la nieve y alguna que otra lucha. Pasamos un muy buen rato. Al volver hacemos las turistadas de rigor, subir en un ascensor hasta los 3.400m, entrar en una galería de hielo, ir a varios miradores....
Continuamos viaje hacia Zermatt, con la idea de ver el Cervino. Nos alojamos en un pueblo anterior, ya que hasta Zermatt no pueden subir coches que no sean eléctricos o taxis. Lo hacemos en el mismo camping al que vine yo, hace 25 años cuando subí al Cervino y que sigue estando ¡igual de cutre! El tiempo no es muy bueno para los próximos días, así que subimos a ver la montaña de todas formas. No la llegaremos a ver completamente despejada en ningún momento, pero si veremos lo imponente que es. La cara norte la podemos observar íntegramente, desde cerca de las cascadas por las que desagua el hielo. La ruta de bajada es espectacular por un bosque de ensueño con el pueblo de Zermatt a nuestros pies.
Por la tarde/noche nos cae el diluvio universal, por suerte la tienda aguanta casi perfectamente. Como amanece muy mal día recogemos para dirigirnos a nuestra última parada antes de empezar el Tour del Mont Blanc (TMB), el pueblo de Chamonix. Tenemos dos días, el primero hacemos una caminata para ver la Mer de Glace. Es una pasada, una lengua de hielo que hace una curva para bajar entre altísimas montañas. Entre otras podemos ver Los Dru, las Grandes Jorasses. Bajamos también hasta el glaciar donde hay escavada una galería en el hielo. Es una turistada, si, pero a la vez una pasada poder caminar por un túnel de hielo que debe tener más de mil años.
El día antes de empezar el Tour pensábamos relajarnos, hacer la colada, preparar las mochilas...., pero ha amanecido completamente despejado, así que nos hemos subido a la Aiguille du Midi, de 3.800m, eso sí, en teleférico. Aquí nos sale más barato pues hacen descuento a discapacitados y, lo mejor, ¡no hemos tenido que esperar la cola! Yo no había subido nunca, ahora me arrepiento, es impresionante. Volvemos a ver las Grandes Jorasses, está vez si El Diente del Gigante y además la artista de los cuatromiles que lleva al Mont Blanc. Incluso, a lo lejos se ve el Gran Conbin. Lo que no vemos, porque está nublado son el Monte Rosa ni el Cervino. Hay gente andando, con cuerdas, por el glaciar y otros escalando alguna de las agujas que tenemos cerca. Estamos alucinados, casi ni sabemos donde mirar ni que vistas son más impresionantes.
Y de regalo sorpresa, por la tarde, un concierto de órgano en la Iglesia de Chamonix. Hemos llegado cuando estaba acabando el ensayo y Eva ha dicho, que pena llegamos tarde. Un señor que estaba allí nos dice que si queremos que toque para nosotros.. Ha sido una pasada, incluso hemos subido y le hemos estado viendo tocar. Esta con los pies descalzos ya que además de los dos teclados para las manos hay otro que va tocando con los pies. Y no sólo eso, que hay unas «válvulas» que va abriendo y cerrando.
Bueno, pues esto se está acabando... acabamos de terminar el TMB (Tour del Mont Blanc), con un poco de mala suerte porque Martín se ha torcido el tobillo y no ha podido hacer los tres últimos días.
El recorrido es espectacular. Las vistas son impresionantes, hemos podido ver todo despejado incluidas varias veces la cima del Mont Blanc.
Etapa 1: Les Houches - Albergue Du Truc.
Se sube junto a una pista de esquí, tras llegar al collado comienza la ruta de verdad, un camino montañero que a ratos va entre árboles y otros con vistas a glaciares que parece que nos van a caer encima. De hecho se cruza el río que baja de uno de estos por un puente colgante.
El albergue Du Truc se encuentra en una idílica colina, con bonitas vistas.
Etapa 2: Albergue Du Truc - Ref. Croix du Bonhomme
Comenzamos bajando hasta el pueblo de Les Contamines y luego caminando paralelos al río hasta una iglesia donde también se podía llegar con bus gratuito. Luego nos queda una larga subida, la mayor parte por una pista con un río caudaloso y encajonado a nuestra izquierda.
Desde el refugio salimos a dar un paseo: una subida por una arista fácil, pero espectacular.
Día 3: Ref. Croix du Bonhomme - Ref. Elisabetta
Comenzamos con una pequeña subida en 30 minutos estamos arriba y vemos que podemos subir a la Tete Nord des Fours, que está cerca y tiene una tabla de orientación, de esas que señalan todos los picos que puedes ver. Es guapa la vista, con el Mont Blanc bastante cerca y despejado.
El refugio de Elisabetta está fenomenal debajo de un par de glaciares que están muy cerca.
Día 4: Ref. Elisabetta - Ref. Bertone
Los dos pueblos importantes junto al Mont Blanc son Chamonix en el lado francés y Courmayeur en el italiano. Por este último vamos a pasar hoy.
Después de bajar durante una hora por una pista Eva y David, que no se encuentra muy bien, bajan en bus hasta Courmayeur. Mientras Martín y yo nos cogemos el camino del TMB que nos sube hasta un collado con muy buenas vistas: la arista Innominata la tenemos en frente, con el glaciar de la Miage. Un poco más allá se ve el Diente del Gigante y Las Grandes Jorasses, desde el lado contrario al que vimos desde la Aiguille du Midi. Seguimos bajando con buen ritmo hasta que llegamos a un refugio/cafetería que está encima de Courmayeur. Un peruano, que está trabajando allí, pega la hebra con nosotros y nos dice que se tarda 1h30 en bajar. Lo hacemos, a la carrera, en 35 minutos y eso que son 1200m de desnivel. El camino es muy empinado y estrecho, lleno de raíces.
Como David sigue sin encontrarse bien y a Martín le duele algo la rodilla, deciden subirse un tramo en bus. Eva y yo tenemos mil metros de subida por un camino precioso, pero sin ningún respiro.
Día 5: Ref. Bertone - Ref. Elelena
Hoy tenemos dos opciones, una larga y una corta. Me he empeñado en hacer la larga pensando que tendríamos mejores vistas. Igual no merecía la pena... al llegar a la parte final de la primera subida resulta que vemos que sale un camino que va hacia donde nos dirigimos y que quizás nos evite la siguiente subida que nos queda. Como hay algo de cansancio y vemos a una gente que va por ahí, nos decidimos a cogerlo. ¡Error!, al poco rato el camino medio desaparece y tenenos que ir buscando pequeñas trazas que nos llevan a unas antiguas construcciones casi destruidas. Intentamos bajar hacia un valle pues en frente vemos un buen camino, pero está muy empinado y resbaladizo ya que ha empezado a llover.
En esas estamos, mirando si podemos bajar o no, cuando Martín se cae y grita. Se ha torcido el tobillo, le duele mucho. Como por aquí no hay paso nos volvemos justo cuando cae el Gran chaparrón. Buscamos una bajada, en dirección hacia donde venimos, hasta que conseguimos enlazar con la ruta que había descartado.
Bajamos hasta una carretera donde Eva y Martín toman un bus para ir primero a Courmayeur y luego a Chamonix. Allí van al hospital y le dicen que es un esguince, pero nada grave.
Mientras David y yo seguimos hacia el refugio Elena. Pasamos junto a una cascada espectacular y nos dan muchas ganas de darnos un baño. No lo hacemos porque vamos algo tarde y tenemos que llegar al refugio y decir que sólo vamos dos. Antes, sin embargo, pasamos por un río donde hay un nevero por debajo del cual pasa el agua. David dice que nos metamos, eso hacemos con algo de miedito por que no se nos caiga encima.
Día 6: Ref. Elena - Ref. Relais d'Arpette
Esta es la etapa más larga del recorrido, aunque en teoría se puede hacer un buen tramo en bus...
Salimos, David y yo, con buen ritmo por la subida que hay detrás del refugio. Salvamos los 500 metros de desnivel y estamos en Suiza. La bajada es fácil y cómoda, en no mucho tiempo llegamos al pueblo donde se supone que se toma el bus. Cuando vemos el precio, 12€, se nos quitan las ganas de tomarlo y seguimos andando. Vamos por una ruta preciosa siguiendo un canal de agua que está debajo del camino.
Tras salir de este camino vamos cruzando el río de un lado a otro y atravesando varias poblaciones. En estos pueblos las casas son muy chulas y muchas tienen gnomos y figuras en el jardín o las puertas.
La subida al lago Champex es un camino que llaman la ruta de los champiñones. Se trata de una senda lleva de raíces y de figuras esculpidas en los troncos de los árboles teniendo a las setas como protagonistas.
Según nuestro GPS hemos hecho 37,5 km.
Han venido, Eva y Martín, a dormir con nosotros ya que se llega con el coche. Eva seguirá ruta con nosotros mientras Martín nos esperará en Chamonix.
Día 7: Ref. Relais d'Arpette - Ref. Ecuries de Charamillon
La etapa más dura con diferencia es la de hoy, no tanto por la distancia o por el desnivel sino por el terreno. No habrá ningún tramo fácil, todos serán algo técnicos con muchísimas piedras. Tenemos mil metros de subida que se hace dura, más dura aún será la bajada, empinada y a tramos resbaladiza. Eva se ha pegado un buen costalazo, por suerte sin consecuencias.
Aún nos queda una subida más, larga aunque no muy empinada. Pasamos junto a una pared vertical bastante impresionante.
David se va por delante pues vamos algo tarde y no sea que la cena la sirvan muy pronto. Eva va cansada y dolorosa pero aguanta como una jabata. La cena es a las 19h, llegamos por los pelos. Hay unas espectaculares vistas del Mont Blanc completamente despejado. Compartimos cena y charla con las chicas vascas (Marta, Olga y Mirari) con las que hemos ido coincidiendo desde hace varios días.
Día 8: Ref. Ecuries de Charamillon - Lac Blanc - Chamonix
La etapa de hoy se supone que es relajada. Una buena bajada y una larga subida, tardamos cuatro horas y media, nos lleva hasta el lago Blanco (Lac Blanc). Hay mucha gente, aunque es una pasada ya que está en un sitio privilegiado frente al Mont Blanc. David y yo nos metemos pero ha sido un baño rapidísimo, no hay quien aguante dentro.
Desde aquí tenemos una bajada de una hora hasta el teleférico que baja hasta el valle de Chamonix. De nuevo nos encontramos con la disyuntiva de si pagar o usar las piernas... cuesta 14,50€ la bajada. David y yo nos bajamos andando a Chamonix. Permitiéndonos así terminar, como debe ser, el TMB.
Después de terminar el TMB y comprar unas camisetas en chamonix comenzamos la vuelta a casa. Primero paramos en el pueblo de Annecy que es conocido como la "Venecia de los Alpes". Se trata de un pueblo de veraneo situado junto a un enorme lago. Dentro del pueblo además de montones de restaurantes, heladerías, tiendas y ordas de turistas, hay varios canales. Están mucho más cuidados que los de la ciudad italiana, seguramente porque son pocos y porque no hay tráfico por ellos. Nos ha gustado mucho, tanto de noche como de día. Lo peor es que estamos a primeros de agosto y parecen haberse citado aquí todos los veraneantes franceses.
De aquí, por no pegarnos la gran paliza con el coche, nos vamos al Cabo de Creus, con dos objetivos: visitar el museo de Dalí en Figueras y poder ir a cenar/comer sin tener que pagar un dineral!!!
El museo nos ha encantado, hemos estado allí bastante rato. Como todo lo que hacía este genial pintor, el museo es también un juego y hay que estar continuamente alerta para descubrir lo que nos quiere decir o lo que se esconde en las obras y/o pinturas. De echo, en varias ocasiones hemos tenido que volver sobre nuestros pasos para volver a observar alguna obra y apreciar nuevos detalles.
¡¡Esto ha sido todo, amigos!!
Saludos buenas rutas , si teneis el track de la vuelta al mont blanc os lo agradeceria si me lo enviarais
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